No penséis que Entre Vestidos Blancos ha estado de Feria, que también, porque con estos trajes de gitana tan maravillosos era casi imposible no lucir alguno. Queremos volver con una publicación muy especial y es dedicada a todas esas madres o como las llaman los italianos: Las mammas. Todas aquellas que desde el primer día que nos tienen en su interior se vuelven en seres maravillosos llenas de grandes dones. Esas mujeres que para sus ojos siempre estamos guapas y no os cuento cuando nos ven en blanco. Celia quiere compartir con vosotros la nueva colección de Dolce & Gabbana en un día muy especial.

Post: Celia De la Torre Bulnes
El próximo domingo se celebra el Día de la Madre. Y aunque no soy muy partidaria de estos inventos de los grandes almacenes cuya única finalidad es embarcarnos en una vorágine consumista, creo que si hay alguien que verdaderamente se merece no ya un día, sino todos los del calendario, esas son las madres. Ellas son capaces de hacer todo por nosotros, siempre están a nuestro lado, con un amor incondicional que no conoce límites.

Lo mismo debieron pensar los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana que en la presentación de su colección para el otoño – invierno 2015/2016 en la última edición de la Semana de la Moda de Milán en la que toman como punto de partida y principal fuente de inspiración la figura de la mamma. Y es que, si alguien manda en Italia, esas son las mammas, auténticas cabezas de familia, mujeres fuertes y decididas a darlo todo por su prole. Y todo ello sin perder un ápice de estilo. Aún recuerdo cómo durante la temporada que viví en Venecia me quedaba asombrada al verlas subir grácilmente las escaleras los puentes llevando en una mano el carrito de sus bebés mientras con la otra manejaban mejor que Fernando Alonso el carrito de la compra, todo ello subidas a unos interminables tacones mientras yo tiraba con mis dos manos de mi carrito sin éxito. Bravas!

Las mujeres siempre han sido fuente de inspiración para los diseñadores italianos, especialmente las grandes divas del cine italiano de los años 40 y 50. De hecho, en palabras de Domenico y Stefano, Anna Magnani fue la primera mujer que les inspiró, la actriz que desde que en 1962 protagonizó la película Mamma Roma de Pier Paolo Pasolini, en la que da vida a una mujer obligada a prostituirse para sacar adelante a su familia, pasó a encarnar en el imaginario popular italiano la imagen de la mamma.



Aunque en esta ocasión Dolce & Gabbana ofrecen una vertiente más dulce y amable de la misma, en un desfile que es una auténtica oda al amor y la felicidad maternal, presentando unas mamás con estilo que se rinden ante las transparencias, las flores y las faldas de amplios vuelos, con un predominio del negro, el rojo, el rosa y, por supuesto, el blanco.


Lejos queda ya el primer desfile de los italianos allá por el año 1985 en el que no tenían dinero para contratar a modelos y pidieron ayuda a sus amigas y en el que emplearon como cortina para el escenario una sábana que el propio Dolce había llevado de su casa. Esa sábana ha dado paso en su último show a una rica cortina de terciopelo rojo que enmarcaba una pared blanca con la palabra mamma y bajo ella una rosa. A sus pies, algunas sentadas, otras de pie, aparecían las modelos con niños de la mano o bebés en brazos, recreando la piazza de cualquier pueblo siciliano. Incluso la modelo Bianca Balti desfiló embarazada.



En prácticamente todos los vestidos del desfile aparecía, bien bordados o impresos, mensajes de amor a las madres, como en este vestido de muselina blanca, de manga larga y falda recta cortada debajo de las rodillas, en cuya parte superior bordado con lentejuelas se lee I love you mamma y debajo una rosa roja. Más rosas rojas aparecen en el frontal de otro modelo de tela brocada y cuello alto, en esta ocasión con una falda corta. Espectaculares los auriculares que completaban el modelo hechos de napa y adornados con perlas, cristales de Swarovski y pelo y cuyo precio oscila entre los 6.600 y los 7.500 euros.


Pero si hubo algo que llamó la atención fueron los modelos en seda blanca y estampados con dibujos y mensajes realizados por los propios hijos de las modistas y las estampadoras. Dibujos de princesas, árboles, flores y casitas se entremezclaban con frases como Sei la mamma più bella del mondo o Ti amo tanto bene escritas con grafía infantil y que adornaban vestidos de corte clásico, con faldas rectas o de clara inspiración años cincuenta, con amplios vuelos.



Una colección, en suma, para celebrar la alegría de ser madre y de poder contar con ellas. Así que os animo a todos a celebrar este día mimando aún más a nuestras madres. Y si tus ahorros no te dan para regalarle un Dolce & Gabbana, no te preocupes: siempre puedes convencer a tus sobrinos para que dejen volar su imaginación con una caja de rotuladores sobre una aburrida camiseta blanca. Y en cualquier caso, un beso y una abrazo seguro que serán el mejor regalo para ellas ese día.
¡Felicidades a todas las mamis!

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